Estimados lectores,
Estamos llegando a final de año en cuanto a eventos sensacionales se refiere. Y lo sabemos porquue la clásica London to Brighton marca el final de unos meses que han sido largos pero muy gratificantes.
La carrera de coches veteranos de RM Sotheby’s rindió un homenaje especial a Fiat y al Ladies’ Automobile Club.
Londres todavía estaba envuelto en la oscuridad antes del amanecer cuando más de 350 coches veteranos pioneros, sus intrépidos conductores, valientes pasajeros y multitudes de madrugadores se reunieron en Hyde Park esa mañana (domingo 3 de noviembre). Todos esperaban con impaciencia el amanecer para marcar el inicio de la carrera anual de coches veteranos RM Sotheby’s de Londres a Brighton de 2024, el evento automovilístico más importante y de mayor duración del mundo.
Han pasado 128 años desde la carrera original de la Emancipación, que se celebró en 1896 para celebrar la recientemente aprobada Ley de Locomotoras en las Carreteras. Esta aumentó el límite de velocidad para las "locomotoras ligeras" de 4 a 14 mph y abolió la necesidad de que un hombre caminara delante ondeando una bandera roja.
El homenaje de hoy, que evoca esa nueva libertad, siempre comienza con el izamiento simbólico de la bandera roja, un ritual que se celebra antes del amanecer y que este año también marcó el 120 aniversario del Ladies’ Automobile Club.
Para celebrar ese hito, Joy Tacon y Queenie Louwman, ambas miembros del Veteran Car Run Steering Group que apoyó a muchas de las aproximadamente 50 conductoras que participaron en la celebración especial de este año, izaron la bandera roja.
Cuando amaneció en una mañana inusualmente cálida, y como preludio del evento, un grupo de 25 motocicletas y bicicletas anteriores a 1905 partió de la línea de salida también rumbo a Brighton. Las valientes ciclistas de la “penny-farthing” despertaron mucha admiración cuando se embarcaron en la Madeira Drive de Brighton en la costa sur.
Otra participante notable entre los ciclistas fue Louise Kennedy, vestida con pantalones bombachos de época, rindiendo homenaje a la notable ciclista inglesa del siglo XIX Tessie Reynolds.
En 1893, Tessie estableció un récord al recorrer en bicicleta las 120 millas desde Brighton hasta Hyde Park en Londres y de regreso en solo ocho horas y 30 minutos. Como vestía pantalones prácticos en lugar de un vestido largo más formal, sus esfuerzos fueron mal vistos; sin embargo, en años posteriores, su recorrido récord ha llegado a considerarse un hito para los derechos de las mujeres en el deporte.
Una vez que se acabó la potencia de los pedales, exactamente a las 7:00 a. m. del amanecer, el primer grupo de carruajes sin caballos anteriores a 1905 fue despedido por Duncan Wiltshire, presidente del Royal Automobile Club que ha comisariado con cariño la carrera desde 1930. A él se unió el concejal Robert Rigby, el alcalde de Westminster.
El más venerable de los vehículos victorianos de "locomotora ligera" encabezó la cabalgata mientras resoplaban y silbaban a su paso por Wellington Arch. Después descendieron por Constitution Hill, pasaron por el Palacio de Buckingham, Admiralty Arch y Whitehall, hasta Parliament Square y cruzaron el Puente de Westminster, bajo la mirada del Big Ben. Aquí, la ruta seca de 60 millas se dividió en dos para evitar la congestión de tráfico en el sur de Londres.
La mitad de los valientes participantes siguieron la ruta tradicional A23 a través de Kennington, Brixton y Streatham Common; la otra mitad atravesó el Puente Lambeth y luego a través de Vauxhall, Clapham Common y Tooting. Las dos rutas luego se fusionaron en la A236 justo al norte de Croydon, y toda la cabalgata mágica se reunió para dirigirse hacia los desafíos de South Downs y, finalmente, el paseo marítimo de Madeira Drive.
Como siempre, los vehículos siguieron por orden de edad, comenzando primero el más temprano, lo que les dio más tiempo para llegar a Brighton. Este año, el primero en salir fue un monocilíndrico Benz de 1894 presentado por Hermann Layher con carrocería Velo y propulsión de un motor monocilíndrico de 1,5 CV.
Entre los primeros en salir estaba el siempre popular coche de vapor Salvesen, que básicamente es una locomotora de vapor que circula por la carretera y que incluye a un fogonero que echa carbón electrónico hecho con una combinación de aceitunas, café y melaza en el horno ardiente de la caldera. Lo acompañaban varios triciclos motorizados primitivos, con muchos conductores y pasajeros ataviados con trajes de época.
Otro de los primeros en salir fue el legendario Fiat 130HP de 1904. Uno de los tres coches de carreras del equipo "Corsa", el icono italiano hacía su primera aparición en el Reino Unido tras una meticulosa restauración de tres años en el Museo Nazionale dell'Automobile de Turín. Con un monstruoso motor de 16,4 litros, el poderoso ganador del Gran Premio de la época, impulsado por cadena, es la bestia más potente que ha participado en el evento y estaba honrando el 125 aniversario de Fiat en 2024.
Después siguió una asombrosa variedad de maquinaria antigua, que se remonta a la era de los vehículos pioneros. Algunos estaban equipados con volantes, otros con timones y cañas de inspiración naval; algunos estaban propulsados por motores de gasolina, otros por vapor (¡de ahí el silbido!) e incluso baterías eléctricas.
La diversidad de sus sistemas de propulsión ilustró el espíritu innovador de la industria embrionaria, ya que diferentes fuentes de propulsión compitieron por dominar el siguiente siglo de desarrollo del automóvil. Un dilema similar enfrenta ahora la industria automotriz mundial más de un siglo después. Para enfatizar los cambios que está atravesando el automovilismo actualmente, varios de los autos veteranos que participaron funcionaban con combustibles electrónicos sostenibles proporcionados por SUSTAIN.
La singular Veteran Car Run de 2024 recordó una época pasada, cuando la tecnología del automovilismo estaba en su infancia y mucho antes de que muchos coches tuvieran techos o parabrisas protectores, y mucho menos comodidades modernas como calefactores a bordo, radios y navegadores por satélite.
Bendecida con un encanto tan excéntrico y una historia increíble, la siempre vigente carrera siempre atrae grandes multitudes a lo largo de todo su recorrido, y este año no fue una excepción.
También atrae a participantes de todo el mundo, y este año se inscribieron coches de Austria, Australia, Bélgica, República Checa, Francia, Alemania, Holanda, Hong Kong, Irlanda, Italia, Países Bajos, Portugal, España, Suecia y Suiza; unos 19 procedían sólo de Estados Unidos.
En total, estuvieron representadas más de 100 marcas diferentes, desde Adler, Albion y Argyll hasta Waverley, Winton y Wolseley. Unas pocas, como Cadillac, Ford, Renault, Vauxhall y Mercedes-Benz, siguen en activo hoy en día, pero la mayoría hace tiempo que no existen. Una de estas últimas, De Dion Bouton, contaba no obstante con el mayor grupo de participantes, con más de 50 participantes.
Aprovechando el tiempo seco, la mayoría de los participantes completaron el sagrado viaje a Brighton mucho antes de la hora límite de las 16:30 horas, y así consiguieron una codiciada medalla de finalistas. De los 369 participantes, 325 llegaron a Madeira Drive a tiempo.
El primer coche en llegar al paseo marítimo de Sussex fue el Panhard et Levassor de 1899 de Shane Houilhan, el antiguo coche de carreras del equipo de fábrica que completó el viaje en poco más de tres horas.
Después de hacer señas a los primeros que salieron, Duncan Wiltshire fue uno de los muchos que saborearon el evento anual (y un bienvenido ponche caliente cortesía del whisky de pura malta Aberfeldy) después de su tranquilo viaje a bordo de un Mors de 1901 propiedad del Royal Automobile Club.
"Qué fantástica carrera de coches veteranos de RM Sotheby's de Londres a Brighton ha sido hoy", comentó entusiasmado un Wiltshire encantado. "La participación de los espectadores fue impresionante, con enormes multitudes alineándose a lo largo de la ruta durante todo el trayecto. También hay que maravillarse con la organización. Se trata de un evento increíblemente complicado que está supervisado a la perfección por más de 300 maravillosos comisarios voluntarios. Son estas personas las que garantizan el avance suave y seguro de todos estos extraordinarios vehículos.
“Ha sido una manera fabulosa de celebrar los 120 años del Ladies’ Automobile Club, así como los 125 años de Fiat”, continuó Wiltshire. “Fue fantástico ver a las damas ondear la bandera roja ceremonial en la salida y luego ver a tantas de ellas conduciendo en la propia carrera.
“Nadie olvidará la increíble vista y el sonido del Fiat 130HP, mientras avanzaba con estruendo hacia el paseo marítimo de Brighton”.
Prensa
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